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El ganadero del Asón Roberto Abascal no ha conseguido convencer a la mujer que tiene al mastín 'Chulo' para que se lo devuelva un año después de que una 'tiktoker' lo recogiera en una carretera de Soba ... . El acto de conciliación celebrado ayer en los Juzgados de Laredo acabó sin acuerdo.
La actual propietaria del perro se negó a entregárselo al demandante y no ofreció ningún tipo de explicación durante la comparecencia, según la información recabada por este periódico. Es la misma postura que tuvo durante el primer juicio, en el que el ganadero denunció tanto a chica que lo recogió como a la que se lo quedó por presunto delito de hurto o apropiación indebida, que tanto la jueza de instrucción como la Audiencia Provincial descartaron.
En aquel momento, la actual propietaria manifestó su intención de quedárselo y reconoció que no contaba con documentación que acreditase la adopción del animal. «El perro estaba en los huesos, desnutrido, deshidratado y con muchas garrapatas. Pesaba 36 kilos y ahora pesa 50. Se ha adaptado a las condiciones que tengo y es feliz», declaró entonces.
Frente esto, el ganadero explicó que tenía previsto instalar el chip al perro en enero de 2024 (días después de que se quedara sin él), cuando el ganado de cabras bajase del monte. Casi un mes después de presentar la denuncia, dice que recibió un mensaje de la 'tiktoker' en el que «me ofrecía una cantidad de dinero a cambio de renunciar al perro y retirar la denuncia». Propuesta a la que ni contestó. «Por dos veces se ha negado a devolverme el perro», que, según dos informes veterinarios presentados por la defensa, tiene un año; mientras que el denunciante dice que «seis meses». «El perro estaba bien cuidado, tenía comida y agua», defendió.
En sus conclusiones, el fiscal descartó cualquier tipo de delito penal y consideró que este asunto debería resolverse en la jurisdicción civil porque «aquí lo que ha habido son una serie de infracciones administrativas por ambas partes: el dueño no tenía registrado el animal ni 'chipeado', con lo que no se podía identificar quien era el propietario por cualquiera que lo encontrara y parece que el animal estaba solo en la carretera, con lo que se debió escapar». Y por su parte, la denunciada (la tiktoker) «incumplió la actual ley de Bienestar Animal que recoge cómo se debe hacer la adopción de perros y quién tiene la custodia de los perros a nivel de ayuntamientos y de Policía Local».
Ese es el camino que ha cedido emprender ahora el ganadero. En primer lugar, como hizo en su caso el rey emérito ha intentado llegar a un acuerdo a través de un acto de conciliación.
Al ver que no ha habido avenencia, el siguiente paso será presentar una demanda civil para que un juez determine si está en su derecho de recuperar a 'Chulo' para que vuelva a cuidar de su rebaño, algo que se antoja complicado tras año y medio en un entorno totalmente diferente.
Para ganar el pleito solicitará la práctica de una pericial consistente en una prueba de ADN con la que el ganadero demostraría que el mastín es hijo de una pareja que está en su poder que sí tiene el correspondiente chip.
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