«Hay que atacar en el foco de la plaga de las pulgas; si no, no sirve para nada»
El Ayuntamiento de Alfoz de Lloredo sigue fumigando la calle donde un vecino tiene en «malas condiciones» a los perros que han provocado el problema a la espera de que actúe el Seprona
El Ayuntamiento de Alfoz de Lloredo continúa con las labores de desinsectación de una de las calles del barrio Los Corrales, en la localidad de ... Cóbreces, donde un vecino tiene «en malas condiciones» a varios perros que han provocado una plaga de pulgas de gran magnitud. El problema, según comenta Benito Baranda, de la empresa para el tratamiento y control de plagas nocivas Descan, «es que si no se actúa directamente en el foco, es decir, en los animales y en la casa, lo que se haga en el resto no sirve prácticamente para nada».
Las pulgas son insectos de entre 2 y 4 milímetros que pueden llegar a saltar hasta 20 centímetros en vertical y hasta 40 en horizontal con el objetivo de llegar a algún animal de sangre caliente -incluidas personas- para picarlas y alimentarse. Además de poder provocar reacciones alérgicas también pueden ser vectores transmisores de enfermedades. En el citado barrio de Cóbreces llevan ya casi dos semanas con pulgas. «Hemos activado el protocolo que nos han marcado desde la Guardia Civil. Hemos solicitado que venga el Seprona y que nos avise para que esté presente el centro canino con el que tenemos convenio», explica Milagros Carmona, presidenta de la Junta Vecinal de Cóbreces. «A los vecinos de la casa de al lado les hemos enviado una empresa especializada en la desinfección de este tipo de casos, porque tuvieron que dejarla debido a las picaduras. Desde que han regresado a ella, no nos han manifestado que haya rastro de estos insectos», añade.
Un vecino de una de las tres casa del barrio «tiene a los perros en condiciones infrahumanas»
Hasta que se pueda actuar sobre los perros, el Ayuntamiento fumiga varias veces al día por el exterior de la casa y la calle donde hay otras dos viviendas. «Pero si el problema está en una vivienda y sólo se puede hacer trabajo en los alrededores, es pan para hoy y hambre para mañana. Aunque menos es nada», explica Baranda. Para acabar por completo con la plaga, este especialista explica que sería necesario actuar en el interior del domicilio. «Sin gente dentro, pulverizamos un producto específico químico y durante 12-24 horas no podría haber nadie dentro. Luego, a los quince o veinte días, habría que regresar para hacer una segunda pulverización», añade. «Esto supone la mitad del tratamiento porque la otra corre a cuenta del propietario, que tendría que mantener una limpieza adecuada para que los resultados fueran realmente eficientes», concluye.
«Desde la Junta Vecinal -afirma Carmona-, estaríamos dispuestos a sufragar los gastos en caso de que esta persona no contase con los recursos suficientes», porque lo que buscan los responsable municipales «es acabar con este problema de salud animal y para las personas».
Por último, el alcalde de Alfoz de Lloredo, Enrique Bretones, asegura que «el problema está controlado y focalizado en un punto muy concreto, pero habría que hacer algo con esta persona que tiene a los perros en condiciones infrahumanas».
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